Tortas de miel

Otro año más llega diciembre y con él los preparativos de la Navidad, que para los blogueros de cocina significa ampliar las comidas navideñas a todo el mes. Este año probablemente no tendré tiempo de publicar tantas recetas navideñas como otros años, pero no quería dejar de ofreceros estas deliciosas tortas de miel.
Estas tortas de miel las vendían todas las Navidades en una pastelería de Cartagena de las de toda la vida y a mi madre le encantaban, la verdad es que eran deliciosas, con su exterior pringoso y dulce y un interior tierno y aromático. hace años que cerraron aquella pastelería, y aunque las siguen haciendo en otras, yo he perdido la costumbre de comprar dulces…si es que casi me gusta más hacerlos que comerlos!

He estado buscando durante años la receta de aquellas tortas de miel sin éxito, así que me he decidido ha usar la receta de mis tortas escaldadas ligeramente modificada bañándolas después en almíbar de miel y el resultado si no es exacto, se acerca bastante, así que ya podremos disfrutar de estos dulces todas las navidades.




Poner la harina en el bol de la amasadora o en un cuenco grande resistente al calor. Poner el aceite en un cazo con una corteza de naranja, ponerlo al fuego y cuando la corteza empiece a dorarse, poner en marcha la amasadora con la pala a la velocidad más baja. Con mucho cuidado de no quemaros, ir echando el aceite caliente sobre la harina mientras la amasadora la va moviendo.

Añadir el azúcar, la levadura, el anís, el zumo y las semillas de anís y seguir mezclando hasta tener una masa bastante consistente. Si queda muy dura se puede añadir algo de líquido (zumo o anís)


Precalentar el horno a 180º. Coger una porción de masa y aplanarla con el rodillo con un grosor de medio cm más o menos y cortar las tortas con un cortapastas, ponerlas en una placa de horno y hornear durante unos 20/25 minutos hasta que estén ligeramente doradas.


Mientras tanto, poner la miel en un cazo con dos vasos de agua y unos trozos de cáscara de naranja, llevar a ebullición y mantener caliente mientras se hornean las tortas. Al sacarlas del horno, irlas sumergiendo en el almíbar caliente y dejarlas durante unos 10/15 segundos, sacarlas y ponerlas sobre una rejilla para que escurran el líquido sobrante. Espolvorearlas ligeramente con azúcar.



Normalmente, cuando amaso las tortas lo hago a mano ya que las cantidades son demasiado grandes para utilizar la amasadora, pero en esta ocasión que he hecho 1/3 de la cantidad habitual he tenido la ayuda de mi amasadora Assistent de Electrolux de la que ya os he hablado en otras ocasiones. La verdad es que la operación de echar el aceite hirviendo sobre la harina es mucho más cómoda con ella. !La verdad es que la utilizo para todo!